jueves, 7 de mayo de 2015

MI CREDO PEDAGÓGICO, JOHN DEWEY.


Artículo nº1: Lo que es la educación.
Según Dewey el niño empieza su proceso educativo inconscientemente desde el nacimiento y continúa formándose hasta participar en los recursos intelectuales y morales de la sociedad. Para él, la única educación verdadera se consigue poniendo a prueba las capacidades del niño antes las exigencias sociales de su entorno. A través de estas exigencias se hace entender y se siente participe de la sociedad.
Este proceso tiene dos aspectos, ambas al mismo nivel y con el mismo grado de importancia:
·         Psicológico: es el básico. Instintos y capacidades del niño.
·         Social: debemos traducir esos instintos.
Las condiciones sociales influyen en la capacidad del niño, es decir, dependiendo del contexto se sabe determinadas cosas. El niño tiene una base formada por instintos y tendencias, necesitan ayuda de la sociedad para desarrollarla.
Las capacidades del niño tienen una finalidad o propósito que viene determinado por el contexto social por lo que el comportamiento depende de la sociedad. Los cambios que se producen en ésta no posibilitan al niño aprender lo que necesita al instante, por lo que debe utilizar partes para que sea capaz de aprender en cualquier contexto y adaptarse a lo que se le requiera.
Los hábitos, intereses, deben ser interpretados para saber lo que significan y así pasarlos a su equivalente social para conocer lo que pueden llegar a hacer en el contexto social.

Artículo nº2: Lo que es la escuela.
Para Dewey la escuela es una institución social, ya que entiende la educación como un proceso social, donde se represente la vida presente y no se centre en el aprendizaje para el futuro. El niño aprende mientras trabaja en comunidad y desarrolla sus capacidades sociales.
La vida escolar ha de surgir de la vida diaria. Debe continuar con las actividades que el niño ve en su hogar, ya que considera que las actividades que no tengan que ver con su forma de vida serán olvidadas rápidamente.
Este tipo de escuela, según Dewey, es necesaria tanto psicológicamente como socialmente; ya que asegura la continuidad del desarrollo, utiliza las actividades tradicionales para trabajar las nuevas ideas de la escuela y continúa enseñando los valores desarrollados en el hogar.
El papel del maestro es el de acompañante en la enseñanza del niño. El maestro no impone ideas o forma hábitos en el niño, sino que selecciona las influencias que le afectarán y le ayudará a responder adecuadamente a éstas.
En este tipo de escuelas no habrá exámenes, si no que se evaluará si el niño tiene una aptitud adecuada para la vida social.

Artículo nº3: Las materias de enseñanza.

La idea que se mantiene y persigue a lo largo del texto, es que la vida social o la sociabilidad del niño es la base de su aprendizaje y desarrollo en relación con las materias de enseñanza, bien sea ciencia, literatura, historia, geografía, etc. Se afirma que la ciencia no se debe transmitir como una experiencia que el niño debe alcanzar, sin ir ligada en todo momento a la experiencia ya presente del mismo, sino que la ciencia proporciona la capacidad de interpretar y controlar la experiencia ya adquirida en el niño y no funcionar como otra diferente y/o distinta. Otro factor muy importante, que se pone de manifiesto es el lenguaje, ya que no es únicamente una mera transmisión de información individual sino que funciona como un “instrumento” mediante el cual, el individuo se hace partícipe de las ideas y sentimientos de la otra persona, si ello no ocurre, pierde su finalidad social. 

Artículo nº4: La naturaleza del método.

La educación debe ser activa. En el desarrollo de la naturaleza del niño es necesario que éste trabaje activamente, que no se convierta en un mero oyente pasivo. Las ideas que se forma el niño, son también resultado de esa acción, y son necesarias para entender el mundo que le rodea.

Por otro lado, la imagen es lo más importante en el proceso de enseñanza, ya que el niño adquiere tan sólo las imágenes que él mismo forma de lo que ve y escucha.  Por ello es imprescindible enseñar al niño a imaginar y formar imágenes de todo aquello que observe y experimente.

Por último, debemos formar hábitos correctos de acción y pensamiento en los niños, ya que el sentimentalismo (resultado de separar el sentimiento de la acción) es una amenaza para la educación.

Artículo nº5: La escuela y el progreso social.

La educación es el método fundamental del progreso y de las reformas sociales.
Según Dewey, es un progreso de la vida, por lo que la escuela es el fin primario. Debe basarse en la conciencia social, y adaptar la actividad individual sobre dicha conciencia para poder conseguir la reconstrucción social.

La educación es la que produce la ética y el deber moral de la sociedad. También debe conocer los intereses y necesidades de la sociedad, e instruir y dotar al maestro para poder satisfacerlo. Todos los profesores en la escuela deben insistir en que la escuela es el medio a través del cual la sociedad se forma y aprende a  vivir en la misma.

La educación tiene que unificar la ciencia y el arte, para poder conseguir un desarrollo integral del individuo, y adaptarlas al servicio social. Los contenidos tienen que estar de acuerdo al desarrollo del individuo.

Por último, el maestro debe educar a los alumnos tanto de forma académica como de forma social; ya que ha de ser un servidor social destinado a mantener el orden social y asegurar el desarrollo social de sus alumnos. 

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